Las colinas tienen ojos (V.O. The hills have eyes)
EEUU, 1977
Director: Wes Craven
Guión: Wes Craven
Intérpretes: John Steadman (Fred), Janus Blythe (Ruby), Peter Locke (Mercury)
Música: Don Peake
Género: Thriller, terror, slasher
Argumento
La familia Carter se dirige a California en caravana a través del desierto. Bob y Ethel, los padres, van a celebrar sus bodas de plata. Con ellos viajan sus hijas Lynne y Brenda, el hijo Bobby, el yerno Doug (marido de Lynne) y la bebé Katy (hija de éstos últimos). También dos perros acompañan a la familia.
Los Carter hacen un stop al ver el taller que el viejo Fred tiene por aquellos áridos parajes. Con el anciano estaba una joven llamada Ruby, quien parecía conocerlo bien y le pedía comida. La chica se esconde al ver llegar la caravana. Bob, que es un policía retirado, compra lo que necesita y se dispone a proseguir su marcha. Fred le advierte que no tome el atajo que va a través de las colinas, recomendándole que para dirigirse a California continúe por el camino principal. Al parecer tiene motivos de peso para darle ese consejo…
Sin embargo, Bob prefiere hacer caso omiso y la familia se interna por la zona más desolada del desértico territorio. No tardan en darse cuenta de que se han perdido. Consultando un mapa, a las hijas les llama la atención con desasosiego que se encuentran muy cerca de una zona donde se realizan pruebas nucleares. Además hay una base militar no lejos de allí. Pronto unos aviones del ejército surcan los cielos a gran velocidad y a baja altura, casi sobre la caravana de los Carter, provocando que éstos se salgan de la calzada.
Tras el accidente todos resultan ilesos, pero el motor está averiado y no pueden continuar su viaje. Aún es de día, y deciden buscar ayuda. Bob y Doug parten en direcciones diferentes. La familia está en posesión de dos pistolas, para poder defenderse en caso de emergencia. Una se la lleva Bob y la otra se la queda su hijo Bobby, quien permanece con las mujeres.
A Brenda le parece que incluso con la luz del día esa zona resulta inquietante. También los perros están muy nerviosos, ladran y aúllan sin parar. Y no es para menos, pues desde las rocosas colinas alguien les está observando con prismáticos…
Por la noche, la perra “Beauty” se escapa hacia los cercanos cerros; parece haber descubierto una amenaza. Bobby la sigue, y poco después la encuentra brutalmente destripada.